Estado y religión en Israel

El ejército israelí viene desarrollando un programa para convertir a sus soldados al judaísmo. Y todavía conozco personas que dicen que Israel es una democracia... En ese país no existe separación alguna entre el estado y la religión judía. No existe allí el matrimonio civil; solo el religioso. Todos los fundamentos mitológicos del estado hebreo están relacionados con la religión judía (peor todavía, con la Biblia). La nacionalidad israelí no es plena hasta que el individuo se convierte al judaísmo, como bien saben muchos inmigrantes procedentes de las repúblicas ex soviéticas, y mucho más los árabes (son oficialmente denominados "árabes israelíes", algo así como si en España se hablara oficialmente de "gitanos españoles"). El mismísimo primer ministro Ehud Olmert, supongo que visto que su carrera política ha terminado, ha reconocido que los árabes son discriminados en Israel (¡para qué hablar de los palestinos de los territorios ocupados!).

Además, es inevitable que, cuando existen estas diferenciaciones étnicas y religiosas, muchos se encarguen de definir y establecer quién y cómo merece ser considerado un "verdadero" judío. Son consecuencias necesarias de todo nacionalismo étnico y excluyente, como el que impera en Israel, a derecha y a izquierda. Al otro lado de este espejo están los nazis, por cierto. Pueden leer aquí una breve muestra de lo que estamos diciendo y que, bajo la hegemonía de los askenazíes (judíos originarios del centro y este de Europa), se refiere a las discriminaciones que padecen los mizrahíes (judíos de origen árabe). Su "judeidad" es sospechosa, no es pura.

Como trataremos de mostrar en este blog a través de informaciones y reflexiones venideras, Israel no es una democracia. Es un estado étnico, excluyente y racista que respira intolerancia y agresividad por todos sus poros. Las principales víctimas del sionismo o nacionalismo judío son, como es bien sabido, los palestinos de los territorios ocupados. En este blog mostraré cómo son vulnerados sus más elementales derechos humanos, cómo son discriminados bajo un auténtico régimen de apartheid, como ha reconocido el mismo relator especial de Naciones Unidas y activistas sudafricanos pro derechos humanos, algunos de ellos judíos.

Termino, por ahora, no sin recomendar otro artículo:

Apartheid en la universidad israelí: Académicos israelíes protestan por el veto impuesto por el ejército israelí a los estudiantes palestinos